El abogado Roberto Saucedo Pimentel y el periodista Arnoldo Cuéllar Ornelas hemos tenido el dudoso honor de ser los primeros protagonistas de un juicio por daño moral, la figura que sustituyó a la difamación de honor como instrumento legal para acotar la libertad de expresión.
Ilustración: @PincheEinnar
A diferencia de otros casos a nivel nacional, nuestro demandante no es un político molesto por la crítica, sino un empresario de medios de comunicación que ha convertido a una modesta televisora en un canal de cable de la capital del estado y algunos otros municipios, en instrumento de presión e influencia pública al servicio de intereses particulares, tanto de índole económico como político.
El surgimiento de una legión de cuentas falsas en las redes sociales de Guanajuato, sobre todo en Twitter, que encuentran su fin principal en darle marcaje personal a periodistas y activistas de diversas causas, es un fenómeno que merece ser analizado, en el marco del gobierno que recién inicia en el estado.
Diseño: @PincheEinnar
La crítica nunca
ha sido cómoda para los gobernantes, quienes en su fuero íntimo anhelan el elogio,
el reconocimiento social, el amor de sus gobernados. Las voces disidentes son
incómodas, las críticas, argumentadas o viscerales, siempre se identifican con
el “adversario”, con el “enemigo” y no con la simple pluralidad, con las
visiones diferentes desde conciencias diferentes.
El Partido Acción Nacional, gobernante en el estado de Guanajuato desde 1991, parece adentrarse en una lógica de decadencia y descomposición política, visible en varias de sus prácticas, pero sobre todo en una que lo evidencia como pocas: el intento de controlar a los medios y de someter las opiniones independientes y críticas, bien por la vía de la censura, bien por la del ataque personal y el intento de desprestigio.
Que lejos, pero también que cerca estamos de ese 1991.
Lejos porque el PAN de entonces, representado por Vicente Fox Quesada, por Carlos Medina Plascencia, que luchaba por abrirse paso ante la maraña de intereses de los medios de comunicación de la época para hacer llegar su mensaje, no tiene nada que ver con el PAN de hoy, más hijo del PRI que del Maquío.
In Crónica, Video on noviembre 25, 2018 at 3:26 pm
El pasado miércoles 21 de noviembre, una delegación de periodistas mexicanos, entre ellos la guanajuatense Verónica Espinosa, tuvieron una sesión de trabajo con eurodiputados en Bruselas, donde se presentó el programa de colaboración “De la Mano”: el Parlamento Europeo con el periodismo mexicano.
En su intervención, la corresponsal del semanario Proceso y editora del portal digital El Otro Enfoque fue puntual y enfática en señalar los riesgos con los que se realiza la tarea periodística en México y las amenazas que se ciernen sobre el ejercicio de la libertad de expresión.
De acuerdo al investigador Sergio Aguayo, hay por lo menos media docena de juicios entablados en el país contra medios de comunicación y comunicadores mediante la figura del “daño moral”, establecida al derogar los delitos de difamación y calumnias de los códigos penales del país.
El propio Aguayo enfrenta un proceso iniciado por el exgobernador de Coahuila Humberto Moreira, sobre quien el académico del Colegio de México y colaborador del periódico Reforma y del Canal 11, había realizado y publicado investigaciones sobre sus actos de corrupción y la presunción de nexos con el crimen organizado.
Cada vez más rebasados por el nuevo espacio público digital, los medios tradicionales se atienen a sus viejas reglas y creen que solo ellos hablan por una opinión pública que en realidad nunca representaron.
Como chiste de mal gusto, pero también como una rancia verdad de facto, los barones de los medios de la pasada generación aseguraban que “la libertad de prensa era solamente de los que tenían una prensa”. Lee el resto de esta entrada »
Que un doctor en derecho por Salamanca se comporte como un atrabiliario líder corporativo al usar el recurso público para castigar críticas, resulta altamente decepcionante.
Una nota anecdótica, curiosa, hasta simpática, sobre las preferencias en materia de vestuario del nuevo rector general de la Universidad de Guanajuato, la principal casa de estudios pública de la entidad, motivó que el funcionario reaccionara cancelando la publicidad en Zona Franca, el portal donde se hizo la publicación. Lee el resto de esta entrada »