El constructor de vivienda Oscar Flores había andado de capa caída en los últimos años. Primero enfrentó litigios por despojos, a mediados de la década pasada, que incluso lo obligaron a pisar la cárcel. Después, fracasó en el intento de obtener subsidios públicos para un intenso programa de vivienda popular en la zona de Las Joyas.
A últimas fechas, las nuevas reglas para edificación de vivienda, que privilegian la densificación de los centros urbanos y cancelan las ciudades satélite para la vivienda social, luego de que muchos de esos desarrollos se convirtieron en verdaderos habitáculos fantasma, dejó a Floper, la empresa de Flores, con grandes cantidades de terrenos ociosos.
Hasta ahora, cuando se juntaron el hambre con las ganas de comer. Read the rest of this entry »