El año termina con los partidos de oposición desgañitándose por el activismo atrabancado de los precandidatos panistas a la gubernatura de Guanajuato; también termina con la sensación nítida de que la autoridad electoral se ha convertido en una dependencia tan infame como lo era la vieja y casi olvidada Comisión Estatal Electoral que presidía el secretario de gobierno en los tiempos priistas. Lee el resto de esta entrada »
